Con un total de cinco bajas importantes entre los dos equipos tanto Peñas Huesca como Ribeira Sacra tuvieron que tirar de la polivalencia de algunos de sus jugadores para que sus esquemas de juego no se resintieran de cara a un importante encuentro. Y no le fue nada mal al conjunto de Quim Costa durante los primeros compases de un duelo en el que los oscenses fueron capaces de aguantar el pulso propuesto por el cuadro gallego. Con un 9-6 durante los 4 primeros minutos, los locales terminaron de espolear a los de Lisardo Gómez quienes no tardaron en dar la vuelta al marcador de un Palacio en el que Devon Van Oostrum saltó a pista para tratar de anular el parcial de 0-9 favorable a su rival. El base se estrenó con la camiseta peñista no pudiendo anular los efectos de la dupla formada por unos Dani López y Chris Mortellaro que colocaron por primera vez a los suyos 10 arriba al borde del descanso (22-32).

Con la complicada misión de recortar diferencias en el marcador regresaron a pista los de Quim Costa pero su dominio del rebote (35-37) no pudo compensar las 19 pérdidas de balón con las que fueron aportando pequeñas dosis de oxígeno al cuadro gallego. Sin una pieza clave como Álex Llorca, los visitantes confiaron en su juego interior para ir incrementando unas diferencias que llegaron a superar la veintena a comienzos de un último periodo en el que el paso de los minutos sirvieron para certificar la permanencia gallega en el coliderato de la tabla (58-74).

La clave: El mejor Chris Mortellaro de la temporada permitió al Ribeira Sacra sacar petróleo dentro de una pintura en la que campó a sus anchas con un total de 19 puntos y 5 rebotes que hicieron de él el MVP del conjunto celeste.