Con la incógnita de conocer cómo podía llegar a la cita un Quesos Cerrato mermado por las bajas dio comienzo un encuentro en el que los palentinos sorprendieron de inicio demostrando que su mejor versión podría estar de nuevo de vuelta. Alternándose el mando en el electrónico con su rival durante todo el primer acto, los hombres de Natxo Lezkano mandaban en el marcador cuando un triple de Ale López a falta de 12 segundos para la conclusión del primer acto marcó el inicio de un parón de 20 minutos en el juego. El motivo, la lesión del árbitroÁngel de Lucas quien fue rápidamente sustituido por un Germán Morales presente en el Pazo debido a la disputa de la fase de ascenso a LF que se está jugando en la ciudad. La reanudación mantuvo las espadas en todo lo alto con un segundo periodo en el que los puntos de Osvaldas Matulionis mantuvieron viva la llama de un Ribeira Sacra que focalizó sus preocupaciones en un inspirado ex, el base Dani Rodríguez(38-39).

 

 

Tras 20 minutos de igualdad poco cambió tras el paso por los vestuarios. Conscientes de la necesidad de comenzar a imponer su estilo, los hombres de Lisardo Gómez realizaron diversas probaturas sobre la cancha tanteando el estado de sus hombres de referencia. A falta de los últimos cinco minutos de partido el Ribeira Sacra imprimió un a nueva marcha al encuentro a la búsqueda del paso definitivo hacia un triunfo que Oliver Arteaga trataba de impedir con su acierto en el rebote. La explosión ofensiva de Álex Llorca penetrando una y otra vez el aro rival contagió de su espíritu ganador a sus compañeros con mención de honor para un Chris Mortellaro clave con su trabajo en el rebote. Dos capturas consecutivas del center pusieron a los de casa 10 puntos arriba -su máxima hasta el momento- obligando a Lezkano a parar el encuentro con menos de 3 minutos por jugarse. Una nueva captura de Mortellaro (91-75).

La clave: El despertar anotador de Álex Llorca tras el descanso tomando el relevo de Matulionis para comenzar a minar la confianza de un rival que terminó por sucumbir ante el magnífico trabajo bajo los aros de Chris Mortellaro. El americano castigó a sus ex para decidir el encuentro con +17 val. que hicieron estériles los 29 tantos de Oliver Arteaga.

 

Fotos: Patt Muñoz (CB Breogán)