El Grupo Municipal Socialista de Miño incluyó en el último pleno celebrado en el municipio un ruego en el que solicitaba que los servicios jurídicos emitiesen informe al respecto de si cumplía la legislación la licitación de un contrato de seguro para cubrir los riesgos derivados del uso y circulación de la flota de vehículos municipales, que figuraba pendiente de adjudicar en el perfil del contratante del Concello de Miño. Tal y como advertía el PSOE miñense, el alcalde no es órgano de contratación competente para este fin. En todo caso, debería ser el pleno el que tome la decisión al respecto vistas las condiciones del pliego.

La secretaria de Miño da la razón a los socialistas y anula la licitación de un contrato de seguro para los vehículos del Concello. El pliego de cláusulas administrativas de dicha licitación contemplaba en su artículo 3º: "La duración del contrato será de cuatro años, prorrogable anualmente por mutuo acuerdo de las partes, de forma expresa, por un máximo de otros dos años". Los socialistas advertían que la disposición adicional segunda do Real Decreto Legislativo 3/2011, por el que se aprueba el texto refundido de la Ley de Contratos del Sector Público, establece que la competencia de los alcaldes como órganos de contratación en determinados contratos cuando su importe no supere el 10% de los recursos ordinarios del presupuesto, ni los seis millones de euros, ni su duración supere los cuatro años. De ahí que solicitasen un informe de los servicios jurídicos, dado que el pliego de la licitación establecía un plazo de ejecución que podría superar los cuatro años (4+2). El PSOE de Miño consideraba, tal y como se ha demostrado finalmente, que se incumplía el tope temporal fijado en la legislación vigente, siendo, por lo tanto, competencia del Pleno municipal una contratación con ese perfil.

 

Sin gabinete de comunicación

Desde la alcaldía también se intentó licitar la contratación de un gabinete de comunicación, pero ésta se anuló por el excesivo gasto que suponía. El intento del alcalde 'solitario' contó con un informe negativo de la intervención que consideraba que ese gasto podría restar capacidad para hacer frente a las voluminosas deudas ya contraídas por el Concello de Miño.

 

Sin gobierno y sin apoyos

El no haber conseguido llevar a buen puerto estas dos contrataciones pone una vez más de manifiesto que el alcalde 'solitario' es incapaz de poder gobernar Miño. Su situación, sin gobierno y sin respaldo, le invalida para poder sacar adelante incluso cuestiones de lo más básico pertenecientes al día a día municipal. Si esto sucede con contratos de este calado, los socialistas temen qué pasará cuando se tengan que abordar desde la Alcaldía cuestiones mucho más acuciantes para el futuro de Miño.